Hoy más que nunca en el cristianismo de occidente se ha fortalecido y difundido la idea de que la vida cristiana es un dechado de comodidades, logros materiales y autosatisfacciones, de tal forma que satanás ha logrado implantar exitosamente casi de manera generalizada en la mente de muchos creyentes la idea de que el triunfo de un cristiano se mide por su prosperidad y comodidad material. Es conveniente dar un vistazo a la historia que nos narra la biblia sobre los Profetas de Dios, como también sobre los Apóstoles y los maestros notables del cristianismo a lo largo del tiempo y nos daremos cuenta sin mucho esfuerzo que el triunfo de un hijo de Dios a diferencia de lo que satanás difunde por medio de falsos ministros desde la mayoría de púlpitos contemporáneos no consiste necesariamente en prosperidad o comodidades materiales, ¡Sino en ser fiel al evangelio hasta la muerte!